Como es sabido por la mayoría, hace una semana ocurrió un terremoto que azoto ciudades en Turquía y Siria, dejando miles de victimas. Mas de 13 millones de personas vivian en las 10 provincias turcas afectadas por el desastre, en las que se tiene el temor de que todavía sigan tapadas por toneladas de escombros, decenas de miles de personas.
En el pasado sábado, los equipos de rescate turcos han conseguido salvar a un bebe de a penas 2 meses que llevaba 128 horas bajo las ruinas de un edificio, a causa de los catastróficos terremotos del pasado lunes que ya se han cobrado la vida de mas de 25.000 habitantes tan solo en Turquía. Este pequeño logro ser rescatado de los escombros de un edificio en la provincia de Hatay. No es el único rescate que se ha producido en las ultimas horas, a pesar de que a medida que los días avanzan, las posibilidades de encontrar supervivientes se hacen cada vez mas chicas.
Afortunadamente, un joven de 13 años fue rescatado de las ruinas del edificio donde vivía en Hatay después de haber pasado también mas de 128 horas bajo los escombros.
Para el día jueves 9 de febrero, el numero de victimas entre ambos paises había ascendido a mas de 17.000, día que las esperanzas de los rescatistas de encontrar mas sobrevivientes bajo las ruinas habían desaparecido a raíz del clima hostil que esta viviendo la zona.
Otro caso fue el de una familia de 5 personas que fue rescatada de los escombros de su hogar en Nurdag, provincia de Gaziantep, luego de estar mas de 130 sepultados debajo de las ruinas. El equipo de especialistas en rescate consiguieron salvar primero a la madre y a una de sus hijas, posteriormente lograron rescatar al padre, el cual les pidió por favor que liberasen primero a sus dos hijas que todavía se encontraban atrapadas cerca de él. Luego de varias horas trabajando, todos los integrantes de la familia pudieron ser rescatados y luego trasladados al hospital para realizarles las pruebas medicas necesarias, según comentaron en la señal turca TRT.
A estas horas, el numero de muertos solo en tierras turcas asciende a 25.734, según los últimos datos que ha difundido el presidente de Turquía, Recep Tayvip Erdogan.
La situación entre aquellas personas que lograron sobrevivir al desastre se ha vuelto muy complicada: Aproximadamente un millón de personas han perdido sus hogares (según datos oficiales) en una zona muy importante del sureste de Turquía, la cual abarca 10 provincias y que tiene una superficie mayor a la de Portugal.
A esta complicación se le suman otras dificultades como son la falta de servicios básicos, como son el agua, la calefacción y la electricidad. Muchos de los hospitales de la zona se han visto afectados y los que quedaron funcionando ya se encuentran al limite de sus capacidades a raíz del gran numero de heridos. También hay problemas en las comunicaciones telefónicas e internet.
Profesionales de la salud han advertido que se corre el riesgo de una epidemia si no se mejoran las condiciones de salubridad y si sigue en falta el acceso al agua, a los productos de higiene personal y a la atención medica básica para poder tratar enfermedades infecciosas que han podido contraer a causa de los derrumbes.