Ultimamente vemos mucha gente que lleva un brazalete rojo en la mano izquierda, muchos piensan que está de moda, pero para otros es considerado un amuleto de protección contra las malas energías.
¿Se puede poner la pulsera en otra mano?
El brazalete debe colocarse en la muñeca izquierda (es el lado receptor del cuerpo y del alma), haciendo una conexión vital con las energías protectoras.
Al colocarte la pulsera debes tener pensamientos positivos, no debes maldecir a las personas ni tirar objetos, esto se hace para recibir lo mismo. En la Cábala es una antigua tradición enrollar el hilo siete veces alrededor de la tumba de Raquel, la esposa de Santiago, quien después de muchos años dio a luz a dos hijos: José y Benjamín. Durante el nacimiento de Benjamín, Raquel murió y fue sepultada en el camino entre Jerusalén y Belén, en la tierra de Israel. Después de que el hilo rojo se enrolla alrededor de la tumba, adquiere poderes místicos.
Según la Cabalá, Raquel representa el mundo físico en el que vivimos. Su mayor deseo es proteger y defender a todos sus hijos del mal. Cuando atamos el Hilo Rojo alrededor de nuestra muñeca izquierda, sellamos su poderosa energía protectora dentro de él. La persona que ata el hilo a tu mano debe ser alguien que te ame y solo quiera lo mejor para ti.
Si eres una de esas personas muy sensibles o espirituales, sabes que usar este tipo de amuletos amplifica el potencial para erradicar la negatividad para siempre y también es un recordatorio para no juzgar a los demás ni enviar energía negativa.
¿Por qué siete nudos?
El brazalete está conectado con una serie de siete nudos, cada uno de los cuales simboliza una dimensión espiritual que finalmente impregna nuestra realidad.
Usado en la muñeca izquierda, se dice que funciona como una inmunización espiritual contra las fuerzas destructivas del mal de ojo. Hoy nadie duda de que los colores emiten energías y que emiten frecuencias específicas. El color rojo, por ejemplo, tiene que ver con la advertencia de peligro. Al colocar esta pulsera roja en nuestra muñeca, nos protegemos del peligro.